Con mucha ilusión, los 4 hermanos propietarios de Can 28, dos de ellos dedicados a la actividad agrícola (viñedos, olivos, manzanos) y con un pequeño rebaño de ovejas, hemos puesto en marcha este proyecto para ofreceros una experiencia inolvidable en un entorno idílico.
Después de varias generaciones dedicadas a la agricultura y a la ganadería, ahora Can 28 se abre al turismo.